Historia, Cultura y Patrimonio

BREVE RESEÑA HISTÓRICA DE ARGELIA
Debido a su posición estratégica en la encrucijada de África y el Mediterráneo, Argelia, situada en el centro del Magreb, ha visto sucederse en su territorio a muchas civilizaciones.

Los primeros indicios de presencia humana en Argelia se remontan a más de un millón de años (hombre de Ain hanech). Los primeros habitantes bereberes vivían de la agricultura, el pastoreo y la caza.

Hacia el año 800 a. C., los fenicios fundaron numerosos contadores en la costa argelina.

Durante las guerras púnicas que opusieron Cartago a Roma, el rey bereber Massinissa se apoderó de Cirta (actual Constantino) y la convirtió en su capital. El mausoleo de El Khroub es hoy testigo del esplendor de esta época.

Tras la revuelta de Jugurtha, nieto del rey Massinissa, su reino se fragmentó y, a pesar de su feroz resistencia contra Roma, Numidia, que cayó en manos romanas, se convirtió durante siglos en el granero del imperio.
De esta época quedan como testimonios numerosos restos arqueológicos entre los que podemos citar a Djemila, Timgad, Tipaza…

A partir del 432, los vándalos, bajo el mando de Jenserico, arrasaron el territorio númida y fueron a su vez derrotados por los bizantinos en el 533.

En 647, los árabes, comandados por Okba Ibn Nafaa, compañero del Profeta, se establecieron bajo la bandera del Islam en Argelia. Las tribus bereberes adoptaron el Islam de forma masiva y contribuyeron en gran medida a su expansión e influencia hasta Andalucía.

Varias dinastías, los rostómidas (776-909), los fatimíes (908-972), los ziríes (972-1148) los hamaditas (1007-1152), los almorávides (1052-1147), los almohades (1147-1269) los Zianides (1235-1554)… se encontraban entre los reinos conocidos en Argelia entre los siglos VIII y XVI.

Las realezas que gobernaban Argelia, debilitadas por los incesantes ataques españoles, acabaron llamando, a principios del siglo XVI, en 1514, a los hermanos Aroudj y Kheir Eddine Barberousse. Este último, por mandato del sultán de Constantinopla, ayudó a expulsar a los españoles de la costa argelina. En 1587 Argelia se convirtió en una regencia otomana que gozaba, sin embargo, de una gran autonomía.

En 1830, comenzó la colonización francesa. Desde esa fecha hasta el estallido de la guerra de liberación nacional el 1 de noviembre de 1954, la potencia colonial tuvo que hacer frente a la resistencia del pueblo argelino. La independencia de Argelia fue proclamada el 5 de julio de 1962.

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